Skip to main content

Response to Ad from Catholics for Choice

Tuesday, September 20, 2016

Most Rev. James A. Tamayo supports the following statement:

On Monday, full-page advertisements ran in the San Antonio Express-News, the Houston Chronicle, and the Dallas Morning News from a Washington D.C.-based entity called Catholics for Choice.

Despite what is implied by its name, Catholics for Choice is not a member-oriented organization and has no affiliation with the Roman Catholic Church. Instead, it is financed by grants from a few secular organizations pushing a pro-abortion agenda. It seldom ventures beyond Washington to Texas, unless it is to buy expensive, full-page ads when it serves their pro-abortion agenda.

It is not clear why Catholics for Choice chose a handful of individuals identifying themselves as Catholics as ambassadors for the false premise that refusal to pay for someone’s abortion is an assault on anyone’s God-given dignity. The only assault on dignity in this discussion is the abortion, which ends one life and irrevocably diminishes countless other lives.

The misguided campaign of the so-called “Catholics for Choice” organization misrepresents the moral guidance of our Church. The Bishops of the United States, in accord with our Holy Father, Pope Francis, have been unequivocal in proclaiming the dignity of unborn human life. Millions of Catholics in Texas actively live out this teaching in our pro-life ministries and advocacy. 

Nor is it clear why this small activist group insists on describing itself as “Catholic” when it apparently declines to embrace and live the principles of the Catholic faith. Catholic social teaching is based on and inseparable from our understanding of human life and human dignity. Every person, from the moment of conception to natural death, has inherent dignity and a right to life consistent with that dignity. Catholics, by definition, are in accord with the essential teachings of the Church and embrace the faith that has been handed down to us through Jesus Christ and the apostles. Someone cannot call themselves a Catholic, yet reject the sanctity of life by active support of abortion. 

Sept. 12, 2016

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

El Señor Obispo Jaime A. Tamayo apoya la siguiente declaración:

Declaración en respuestaa la campaña de Catholics for Choice

El día lunes se publicaron anuncios a plana completa en los periódicos San Antonio Express-NewsHouston Chronicle, y Dallas Morning News de parte de una organización radicada en Washington D.C. denominada Catholics for Choice.

A pesar de lo que su nombre implica, Catholics for Choice no es una organización orientada a tener membresía, ni tiene filiación con la Iglesia Católica Romana. Por el contrario, es financiada mediante subvenciones provenientes de unas cuantas organizaciones seculares que promueven una agenda pro aborto. Sólo en raras ocasiones se aventura más allá de Washington hacia Texas, a menos que sea para comprar anuncios caros, de plana completa, cuando esto sirve a su agenda pro aborto.

No queda claro porqué Catholics for Choice eligió a unos cuantos individuos, que se identifican a sí mismos como católicos, como emisarios de la falsa premisa de que negarse a pagar el aborto de alguien es un asalto a su dignidad dada por Dios. El único asalto a la dignidad en esta discusión es el aborto, que pone fin a una vida y desprecia irrevocablemente a un número incontable de otras vidas.

La engañosa campaña de la organización, así llamada, “Catholics for Choice”, tergiversa la orientación moral de nuestra Iglesia. Los Obispos de Estados Unidos, concordando con nuestro Santo Padre, el Papa Francisco, hemos sido inequívocos al proclamar la dignidad de la vida humana no nacida. Millones de católicos en Texas viven activamente esta enseñanza en nuestros ministerios y defensa a favor de la vida.

Tampoco es claro porqué este pequeño grupo activista insiste en describirse a sí mismo como “católico”, siendo que aparentemente se niega a aceptar y vivir los principios de la fe católica. La enseñanza social católica se basa en nuestro entendimiento de la vida humana y de la dignidad de la persona, y es inseparable de ellas. Cada persona, desde el momento de la concepción y hasta su muerte natural, tiene dignidad inherente y el derecho a la vida, en congruencia con tal dignidad. Los católicos, por definición, concuerdan con las enseñanzas esenciales de la Iglesia y acogen la fe que nos ha sido transmitida a través de Jesucristo y los apóstoles. Una persona no puede llamarse católico y a la vez rechazar la santidad de la vida mediante el apoyo activo al aborto.

12 de septiembre de 2016.